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martes, 10 de noviembre de 2009

Mejorando la aerodinámica del P-40






La primera impresión que se advierte al verlo, es que algo cambia a mejor. Después con más detenimiento se observa una mayor pureza de líneas, y un mejor reparto de dimensiones. Pero la madre del cambio es el diseño alar, el perfil alar del T-6 es superior al del P-40 y su longevidad lo prueba. Lo he decorado basándome en los años finales de la década de los 30, como algunos P-36. Y le he puesto unas escarapelas sobre medida para seguir el contorno del redondeo del ala. Queda claro, en la primera vista lateral, como mejora la visibilidad del piloto, al que antes, parte de las puntas alares le cubría un sector de la visión lateral.

Un Curtiss con una ayudita







Eso de la ayudita es por las alas de North American, que recortadas y redondeadas de nuevo, tienen la envergadura justa para el fuselaje del nuevo T-40. Lo de "T" es por el T-6 (que no por Trainer). El radiador recortado de su posición frontal y puesto en posición ventral es otra mejora que contribuye al equilibrio de pesos y centro de gravedad. El armamento queda con 4 del .50 lo que le equipara a los primeros A-36.

Buscando en un P-40C





























Buscando en un P-40C las mejores líneas, caí en la cuenta de que el borde de ataque de su ala era casi recto, esto sumado al hecho de que el perfil alar era antidiluviano, busqué la forma de invertir esta situación. Igual que un criador de perros probé a cruzarlo con un T-6, y el diseño de su ala más avanzada y aflechada, y esto es lo que ha salido. Raza de Fantasy Planes, vamos a llamarlo T-40C.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Bell P-39 concepto clásico (motor delantero)






















Nos recuerda un poco a su linea, pero si se observan sus detalles todos y cada uno salvo el motor dan sensación de ser superiores. Lo cierto es que el P-40 tenía un ala cuyo perfil era ya obsoleto en 1941, y el superior diseño del Bell P-39 estaba supeditado al cañón de 37mm y a la transmisión de su motor trasero. Este modelo está dedicado a lo que pudo haber sido como avión de no haber sido así. Una pureza de lineas dignas de lo mejor que cruzaba los cielos por aquella época.

Un P-39 con motor frontal.






















Sin cañón de 37mm, pero sin la transmisión del motor bajo la cabina del piloto y con un diseño superior al P-40, el hecho de retirar el motor de la posición trasera, nos permite colocar los depósitos de combustible tras la cabina del piloto y dejar lugar en las alas para otro par de ametralladoras del .50

Sacar partido de un P-39
















A partir de un viejo modelo de Monogram, y el morro de un P-40 de Arii, ambos a escala 1/48, y con mucha masilla hemos obtenido este P-39, que emula los P-40M que combatieron en el Pacífico. La decoración es la del P-40M Gerónimo.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Soluciones a la australiana.


























Las Reales Fueszas Aéreas Australianas ya habían añadido motores americanos con gran éxito a sus Bristol Beaufort, y sus Beaufighter, El nuevo Blenhein es una muestra más de lo que podía haber sido. Como siempre... kilos de masilla milliput y mucha lija sobre un vacuforme viejísimo, así que espero, que no le pidais mucho a los acabados.

El Blenheim americanizado






















Claro, al llevar dos Pratt & Whitney R-1820-66 Cyclone de 1350 HP, frente a los 840 Hp del Bristol , el avión obtiene casi 1000 hp extras de fuerza, lo que unido a la reducción de peso por llevar un solo tripulante y la ausencia de torreta lo convierten en un caza pesado por excelencia. Americanizado también por su morro derivado del P-38 y la disposición de su cabina de origen similar.

Un Blenheim monoplaza






















El Bristol Blenheim fue el bimotor cazabombardero de la R.A.F. más generalizado durante los primeros años de la Guerra. En el Mediterráneo dio el DO de pecho pero ya empezaba a ser un avión anticuado. Fue usado por Finlandia, donde se demostró más duro de lo esperado. Pero para ser un "Fantasy planes" le faltaba algo especial, como motores americanos, el escenario del Pacífico, cabina de burbuja y un armamento sorprendente. Además, hemos estrechado el fuselaje, retirado la torreta y afilado su morro, complementándolo con un complicado tren triciclo.