Adoro Matchbox, siempre llevaré con migo las tardes de sábado, haciendo estas maquetas mientras ponían "Vacaciones en el mar" por la tele. No olvidaré los amigos maquetistas, ni los primeros juegos de mesa a escala 1/72 que en realidad librábamos en el suelo casi sin normas. Pero como decimos aquí... "unos cardan la lana y otros se llevan la fama". Matchbox será siempre un referente, un acierto de Lesney, tan grande como sus cochecitos de metal. Hoy los videojuegos han ganado la batalla, pero algunos seguimos librando esta guerra, que nos enseñó historia, manualidades, organización y orden, así como a buscar información técnica e idiomas. No creo que los juegos de hoy ofrezcan tanto.
Pablo, me has hecho sentir nostálgico :-).
ResponderEliminar¡ Qué suerte tener una afición como esta !
Veo que hemos vivido la misma grata experiencia en nuestras respectivas juventudes.
Igual que tú, pasaba cada sábado por la tarde armando, y pintando, ¡y terminando ese mismo día!, una maqueta comprada por la mañana en mi excursión semanal a la tienda de maquetas.
Jeje, Y no teníamos ninguna preocupación por las opiniones ajenas. Ahora dedico más tiempo aún a volver a ser un niño cada vez que armo una.
ResponderEliminarPues yo, en 1.977 sólo pensaba en jugar a fútbol...faltaban 25 años para descubrir el modelismo. Pero nunca es tarde, ya lo dicen.
ResponderEliminarSaludos
En tu caso, ha valido la pena esperar.
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